Tecuán
En el marco de las fiestas patronales en honor a San
Francisco de Asís, el atrio de la iglesia se transformó en el
reino del tecuán (el que come o devora, en náhuatl), ese omnipresente tigre
mesoamericano -el jaguar- que en la danza de los Tecuanes es perseguido y
cazado por varios viejos asistidos por perros, para después ser banquete de
zopilotes. Una danza festiva, donde no faltan los golpes del combate, el humor
e incluso un funambulismo singular propiciado por los altos árboles en el
atrio. Con música de tambor y flauta de carrizo, los danzantes interpretan el drama... ¡uy, que se come al venadito! (un minúsculo niño de unos tres-cuatro años que
en cuclillas daba saltitos buscando esconderse); ¡ya hay un cazador herido,
vienen a socorrerlo los médicos!; el tigre se contonea, se echa al suelo, da
saltos de acróbata, vuelve al ataque… me divertí como una niña. Hubo, después de todo, fiesta, máscara y sacrificio.
4 Comments:
Algo en mi memoria me habla de los tecuanes...pero hace 50 años me espantaba con los matachines y el ruido de sus machetes que reflejaban batallas primigenias. Y el diálogo entre los adversarios que esgrimian un libro,a veces de hojas manuscritas, más amenazador por las palabras que proferían y que estaban escritas ahí...Y La música! la música era de banda y todavía la recuerdo con todos sus estruendos y nelancolías!
Ah que alegría habría sido compartir con usted esa danza!!
Este blog ha sido eliminado por un administrador de blog.
Este blog ha sido eliminado por un administrador de blog.
I'm very happy to discover this great site. I want to to thank you for ones time for this wonderful read!! I definitely liked every little bit of it and I have you book marked to check out new things on your website.
Also visit my page; pirater Un compte Facebook
Publicar un comentario
<< Home